Aquella noche de verano tu figura paseaba entre los pasillos
de mis fingidas sonrisas, con aquel abrigo gris y con tanta
melancolía. Caminabas hacia mis tristezas y mis lágrimas
derramabas las limpiabas con palabras baratas.
Encontraba tanto misterio en tu mirada y tanta ausencia
entre tus gestos y palabras. Aun recuerdo la promesa de aquel
viernes por la noche, a la cual simplemente decidí callar y
mas nunca pronunciar.
Limpiar las lágrimas con palabras baratas... ¡¡gran frase!! Eso basta para no volver jamás, tienes razón... Kisses!
ResponderBorrarcada que nos pasa algo meláncolico, nos espera algo mejor.
ResponderBorrarLucely? :D un beso, y suerte
Muchas gracias por pasarte por mi blog!! Ya te sigo ;)
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